Somos esperantistas porque somos, antes que nada, españoles. Al abrazar el Esperanto, lo que estamos haciendo en realidad es defender nuestro idioma de la lengua del Imperio actual. Antes era el francés, ahora es el inglés, mañana seguramente será otro. Pero al adoptar la filosofía del Esperanto, lo que estamos diciendo es: lo mío es para mí, lo nuestro para nosotros, y lo neutro para todos.
Hemos leído hace poco en cierta revista que había una página Web dedicada a las obras de Shakespeare, lo cual nos parece muy bien, y digno de ser imitado. No tenemos el tiempo ni la paciencia para ofrecer una página de similares características; pero se nos ha ocurrido que entre todos sí que podríamos pasar al medio electrónico todas las obras de nuestros escritores, empezando, cómo no, por la del Príncipe de los Ingenios.
A pesar de que empezamos a transcribir el Quijote nosotros mismos a este nuevo papiro, pronto llegamos a la conclusión de que la empresa era muy trabajosa y que ya se había realizado anteriormente. Descubrimos que los periodistas del diario El Mundo nos llevaban una buena delantera, y llegamos a la conclusión de que lo inteligente —y más acorde con el espíritu de Internet— era desembarcarnos de semejante empresa agotadora y ofreceros un enlace en esta página a la página de dicho diario.
Por otra parte, la Universidad CETYS, en el Campus Ensenada, ha creado otro Proyecto Cervantes, que es en realidad el mismo nuestro. Hemos estado ojeando lo que tienen hecho, y nos parece de una calidad tan inigualable, que le cedemos la batuta en este terreno, como signo de admiración y de apoyo, y os ofrecemos a vosotros un enlace para que vayáis directamente a su página desde esta. Además de El Quijote, han puesto a nuestra disposición los Entremeses y una amplia bibliografía sobre don Miguel de Cervantes, así como otras obras de otros autores. Esperamos que os guste la excursión a tierras americanas, pues allí radica esta página, que sin embargo está en nuestro idioma.